The High Price of Bullion, A Proof of the Depreciation of Bank Notes es un libro del economista inglés David Ricardo, publicado en 1810. En el expresa su opinión sobre el problema de depreciación del papel moneda en Inglaterra, tras la aprobación de la Restriction Act (1797) que suspendía la convertibilidad del papel moneda en oro. Tras esta ley, el valor del papel moneda superaba el valor en oro que se mantenía en las reservas del Banco de Inglaterra, por lo que suponía un grave peligro para una posible bancarrota del banco. Ricardo, influido principalmente por esta ley, escribe este pequeño panfleto con la idea de criticar tal actuación y argumentar los posibles daños que le pueden ser causados a la nación, para finalmente dar su solución personal al problema.
El oro y la plata, tienen un valor intrínseco, que no es arbitrario porque depende de su escasez, de la cantidad de trabajo en obtenerlo y del valor del capital empleado en la minas para extraerlo.
Si la cantidad de oro empleado como dinero en el mundo es pequeña o abundante afectará al precio de los bienes encareciéndolos o abaratándolos.
Dependiendo de la balanza de comercio de los países, el dinero será distribuido. Una nación que avanza rápido deberá de obtener una mejor proporción del dinero del mundo. Su comercio, sus comodidades y sus pagos serán aumentados y, la moneda del mundo deberá ser dividida en estas nuevas proporciones. En cambio, una nación que pierda parte de su riqueza y su comercio, no podrá retener la misma cantidad de dinero en circulación, una parte será exportada y dividida entre otras naciones. En la última situación, en la que dos naciones tienen el mismo comercio, donde exportaciones e importaciones son iguales, se realizarán pagos pero no se modificará la cantidad de dinero de sendos países, debido a que tendrá el mismo valor en ambos.
Si alguna mina de oro es descubierta en algún país, el valor de la moneda de ese país disminuirá a consecuencia de un aumento en la cantidad de metales preciosos que se han incorporado a la circulación en ese país. Por ello, la moneda no tendrá el mismo valor que en otros países. Esto provocará que sus bienes sean exportados a otras naciones en los que los mismos bienes son más caros hasta que la mina deje de ser productiva.
Un banco, como por ejemplo el Banco de Inglaterra, que tenga potestad para emitir billetes y que a su vez, estos billetes sean prestados a comerciantes y al gobierno, está aumentando la cantidad de moneda, con las mismas consecuencias que en el caso de un descubrimiento de una mina de oro.
Una depreciación del dinero en circulación es consecuencia de su abundancia, debido a ello, es contrarrestada por la exportación de metales preciosos. Ricardo propone que, el papel moneda de una nación debe ser representativo porque solamente comparándolo con esta norma se puede estimar su regularidad o depreciación.
J. Locke, Lord Liverpool y otros escritores proponen que el único remedio para los males de la moneda es la fabricación de una medida estándar de valor. Ricardo propone que el oro sea medida de valor en vez de la plata por el ratio de comparación entre ellos a favor del oro. Ricardo en su argumentación explica algunos ejemplos donde el oro había mantenido su valor y la plata se había degradado, como en el reinado del Rey Guillermo III, cuando tuvo que reacuñar las monedas de plata. También argumenta los posibles intercambios desfavorables con otras naciones, como por ejemplo al pagar las deudas.
Ninguna persona nunca exporta o importa lingotes sin considerar primero la tasa de cambio. Si once florines en Holanda contienen una cantidad igual de plata pura como veinte chelines estándar, los lingotes de plata, iguales en peso a veinte chelines estándar, nunca podrán ser exportados de Londres a Ámsterdam mientras el intercambio esté a la par o desfavorable a Holanda. Se debe tener en cuenta el riesgo y el gasto de la exportación de dicha moneda, por lo que estos, aumentan el valor de la transacción.
Ricardo comenta que los banqueros se han excedido en el aumento de papel moneda en circulación provocando una depreciación del oro que a su vez provoca cambios desfavorables en las exportaciones e importaciones. Por lo que su idea es seguir un patrón oro, donde el papel moneda esté suficientemente respaldado por las reservas de dicho patrón representando el valor del papel moneda con su mismo valor en oro.
Si se consiente dar monedas por bienes, debe ser por elección propia, no por necesidad. Tampoco se debe importar más de lo que se llega a exportar, a no ser que se tenga una cantidad extra de divisas. La exportación de la moneda es causada por su baratura. El exceso es sólo un término relativo, la demanda extranjera surge de la deficiencia comparativa de la moneda del país importador, lo cual hace que su valor sea superior.
La solución que argumenta Ricardo para el problema de la depreciación de la moneda es que el Banco de Inglaterra debe disminuir gradualmente la cantidad de papel moneda en circulación hasta que lleguen al valor que el oro y la plata representan en su acuñación. El fracaso del papel moneda provocaría consecuencias desastrosas para el comercio. Si el Banco tuviera menos guineas de las que tuviera en billetes en circulación, no podrían pagar, sin causar daño al país, mientras que el precio del lingote de oro continuaría muy por encima del precio de acuñación y las divisas desfavorables para Inglaterra. El exceso de moneda se intercambiaría por guineas en el Banco y al exportarse, se retiraría repentinamente de la circulación. Por lo tanto, antes de pagar con seguridad en especie, el exceso de billetes debe retirarse gradualmente de la circulación. Si se hace de esta forma, se sentirían pequeños inconvenientes. Nunca se conseguirá un estado equitativo de la moneda, si no es por esta solución o por el fracaso del papel moneda.
My aim has been to introduce a calm and dispassionate enquiry into a question of great importance to the state, and the neglect of which may be attended with consequences which every friend of his country would deplore.